Buenos días, en ocasiones los medios de comunicación nos
sorprenden con noticias que informan sobre condenas a personas que estafan a
las aseguradoras. Es por ello que hoy seleccionamos esta noticia para comprobar
que de vez en cuando la justicia tiene a bien hacer su trabajo, que no es otro
que hacer honor a su nombre e impartir justicia. Fraude, como no, consistente
en fingir falsas lesiones tras un siniestro de circulación.
Es de destacar que las aseguradoras implicadas hayan llevado
los casos fraudulentos hasta las últimas consecuencias, aunque no todo son
buenas noticias, seguimos echando en falta que los profesionales de la salud
relacionados con los casos, den explicaciones sobre su trabajo y aunque damos
por hecho que algunas intervenciones habrán tenido durante el juicio, la
noticia no hace mención a comentario alguno sobre su labor en la sentencia. No
me parece razonable que los médicos, fisioterapeutas, etc. en cuyo trabajo se
basan las reclamaciones de los estafadores, no den explicaciones sobre su labor.
Porque para realizar una reclamación de daños personales, hay que tener un
informe sanitario que lo confirme y cuando se demuestra, como en este caso, que
2 personas fingían lesiones, creo yo que los médicos y fisioterapeutas tendrán
que explicar en que se han basado para hacer un informe en el que afirmen que 2
personas están lesionadas cuando realmente no lo están. De todos los
profesionales que trabajamos vinculados al sector asegurador, sabemos que hay
reclamaciones fraudulentas de falsas lesiones que no se podrían llevar a cabo
sin los correspondientes informes de médicos que no reconocen al paciente y de
fisioterapeutas que no rehabilitan a los falsos lesionados. Las sentencias
además de servir para impartir justicia, también tienen su función ejemplarizante.
Pues bien, estaremos atentos por si vemos alguna noticia que recoja alguna
actuación contra profesionales que facilitan en ocasiones este tipo de fraudes.
Un saludo.
Josu Martínez
Sentencia millonaria contra un matrimonio que simulaba accidentes para estafar a los seguros
Ambos han sido condenados a pagar una indemnización de más de 1,2 millones de euros y multas de hasta 89.000 euros
El matrimonio acusado de simular accidentes para cobrar del
seguro durante el juicio en Lleida. (ACN)
Agencias, Lleida
22/05/2020 16:33 | Actualizado a 22/05/2020 16:39
La Audiencia de Lleida ha condenado a 7 años y 9 meses de
prisión a un exsargento de los Bombers de Lleida y a 6 años y medio su mujer, ex
auxiliar de enfermería, por delitos continuados de estafa agravada. La Sala
considera probado que el acusado pagó a terceros para simular un primer
accidente de tráfico con él y un segundo con su mujer y cobrar así ambos de los
seguros y de la Seguridad Social de forma irregular. La sentencia también
recoge que entre ambos deberán indemnizar con más de 1,2 millones de euros la
Seguridad Social y cuatro empresas de seguros y pagar multas de hasta 89.000
euros entre los dos. La Audiencia también condena por estafa a 10 meses de
prisión uno de los hombres que colaboró.
Concretamente, la Audiencia de Lleida ha condenado el
exsargento de los Bomberos, JRB, a cuatro años de prisión y 3.000 euros de
multa por un delito continuado de estafa agravada y también a tres años y nueve
meses de prisión más y 3.000 euros de multa por cooperador necesario en un
delito continuado de estafa agravada. Además, le condena a indemnizar con
629.609,92 euros la Seguridad Social y las aseguradoras Axa, Mapfre y Groupama.
En cuanto a la mujer, ERD, la Audiencia la condena a dos
años y medio de cárcel y una multa de 80.000 euros por un delito continuado de
fraude a la Seguridad Social y también a la pérdida de la posibilidad de
obtener subvenciones o beneficios o incentivos fiscales de la Seguridad Social
durante 5 años. También la condena a cuatro años de prisión más y una multa de
3.000 euros por un delito continuado de estafa agravada y a indemnizar a la
Seguridad Social con 60.127,20 euros.
Los colaboradores
El marido habría pagado unos 2.000 euros a otro hombre para
simular un accidente
La sala considera probado que el principal encausado,
exsargento de los Bomberos, planificó dos accidentes. Uno de ellos, el 20 de
marzo de 2010 en la carretera de la Caparrella de Lleida, entre él y otro
hombre, al que habría pagado 2.000 euros, tal como el presunto colaborador
explicó en el juicio. El otro, el 17 de junio de 2015, entre la mujer y otro
hombre, al que el acusado habría pagado 600 euros.
La Audiencia entiende, como denunciaba la fiscalía y los
seguros, que el acusado mintió sobre el origen de su estado físico y simuló
sufrir un trastorno depresivo que le impedía llevar a cabo su trabajo como
sargento de bomberos. Así, consiguió, el 10 de junio de 2011, la incapacidad
permanente total derivada de accidente no laboral. El 7 de enero de 2013 se le
reconoció la incapacidad permanente absoluta.
El “botín”
Con los siniestros lograron cobrar más de 1 millón de euros
de las aseguradoras y la Seguridad Social
Con estas maniobras “fraudulentas”, según se considera
probado, el exsargento de los Bomberos llegó a cobrar 242.000 euros de la
Seguridad Social, 122.774 de la compañía Axa, 100.302 de Mapfre y 158.770 de la
compañía Groupama, aseguradora del vehículo conducido por el hombre al que supuestamente
le pagó por causar el accidente de 2010.
En cuanto a la mujer, ex auxiliar de enfermería, la fiscalía
entendía que simuló que padecía un síndrome ansioso depresivo postraumático que
le impedía trabajar a raíz del accidente de 2015 en la N-II, entre Seròs y
Fraga. Así, se le reconoció la incapacidad permanente absoluta el 31 de agosto
de 2016. La mujer, según aseguraba el ministerio público, cobró 59.769 euros de
la Seguridad Social. 100.271 euros de AXA, 187.289 de Allianz y 325.000 euros
de Allianz, la aseguradora del conductor del coche que supuestamente causó el
accidente, tal como la Sala consideró también probado.
Tras el accidente simulado
La mujer simuló que padecía un síndrome ansioso depresivo
postraumático que le impedía trabajar