Buenos días, como es habitual todos los años, la semana
pasada se celebró la jornada organizada por ICEA de entrega de premios del
XXIII Concurso sectorial de detección de fraudes, donde además se presentaron los
datos obtenidos sobre detección de fraude en 2016. En general los datos
continúan confirmando la línea establecida en los últimos años; aumento del
fraude en general, liderazgo de autos como el ramo más afectado, se sigue
detectando más fraude en el sur que en el norte , el binomio perito- tramitador, continua
siendo claramente el factor más determinante en la detección del fraude y en
cuanto a los datos mejorados, cabe destacar un aumento del fraude detectado,
del importe ahorrado, del ratio de rendimiento con una mejora de casi 2 puntos
(por cada euro invertido por las aseguradoras en detección de fraude
recuperaron 34,7 euros), mayor participación de aseguradoras en esta
iniciativa, lo cual ha supuesto un aumento de la cuota de mercado, llegando al 53,1%.
Por último destacar que se confirma la tendencia al aumento de la detección del
fraude, tanto del profesional como del ocasional, a buen seguro que esto no
solo es debido al aumento de la comisión de intentos de fraude, también a la
cada vez mayor capacidad de las aseguradoras a detectarlo y a la cada vez más
preparación de las redes periciales para realizar labores antifraude, así como
un mercado cada vez más sensible con este problema.
Un saludo.
Josu Martínez.
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XXIII Concurso sectorial de detección de fraudes
Crece el intento de
fraude pero aumenta la efectividad en la detección
Las aseguradoras españolas ahorraron el año pasado 429 millones de euros en indemnizaciones gracias a la detección del fraude. Estos son los datos recopilados por ICEA en su estudio 'El fraude en el seguro español. Año 2016', presentado ayer en el marco de la entrega de premios del XXIII Concurso Sectorial de Detección de Fraudes en Seguros.
La citada cifra corresponde a los datos facilitados por las 41 entidades -cinco más que el año anterior- que han participado este año en el concurso y que han aportado datos para la elaboración del estudio, que representan el 53,1% de cuota de mercado.
Más fraude detectado
Marta Rodríguez, directora del área de Formación de ICEA, especificó que este año se han presentado 180.754 casos, un 7% más que el año anterior. Gracias a la detección del fraude, las aseguradoras que han participado en el informe ahorraron 429 millones de euros en indemnizaciones fraudulentas en 2016, lo que representa un 73,3% de las cantidades reclamadas en estos casos. Además, las compañías obtuvieron un retorno de 34,7 euros por cada euro que invirtieron en la detección (32,9 euros en 2015), debido a un ligero descenso del gasto medio de la investigación, que se situó en 64,4 euros.
La mayor parte de los casos de fraude detectados correspondió a Autos, seguido por Diversos y Personales. Sin embargo, el porcentaje de fraudes evitados fue superior en Diversos y Personales que en Autos. El mayor importe medio del fraude corresponde a los seguros Personales (5.595 euros), por delante de Diversos (2.632 euros) y Autos (2.029 euros). Por este motivo, Personales presenta el ratio del rendimiento de la inversión en detección del fraude más elevado: 80,9 euros por cada euro invertido. Muy lejos se sitúa el rendimiento en Autos (32,8 euros) y Diversos (31,1 euros). En cuanto al gasto de la investigación, destaca el coste medio en Diversos (84,7 euros), por encima de Personales (69,1 euros) y Autos (61,8 euros).
Rodríguez explicó que la asignatura pendiente es el reconocimiento del fraude, ya que los casos se resuelven en la mayor parte sin confesión del defraudador. No obstante, destacó que en Personales se producen más renuncias por escrito que en el resto de ramos, debido a la superior cuantía de las indemnizaciones reclamadas.
Tipología del
fraude
La mayor parte de los intentos de fraude en Autos son reclamaciones desproporcionadas y ocultación de daños o lesiones preexistentes, en este orden; en Diversos, se trata mayoritariamente de siniestros simulados y exclusiones de cobertura; y en Personales, falsedad documental y ocultación de daños o lesiones preexistentes.
El intento de fraude suele destaparse al peritar o tramitar el siniestro, pero también son indicios claros la desproporción de daños y lesiones o las incongruencias en el relato del siniestro. En Personales también despierta sospechas cuando el asegurado presenta antecedentes de fraude o si se observa una contratación próxima en el tiempo a la fecha del siniestro.
En cuanto al reparto por regiones, Andalucía y Murcia son las comunidades autónomas donde se detectó una mayor incidencia del fraude. En el lado opuesto están País Vasco, Navarra, La Rioja y Aragón.
XXIII Concurso sectorial de detección de fraudes
Aumenta el fraude
“informal”
UNESPA aprovechó el acto de entrega de los Premios de Detección de Fraudes de ICEA para presentar las conclusiones de sondeo realizado entre sus entidades asociadas.
Precisó que la mayor parte de los engaños continúan produciéndose en Autos, destacando los repuntes en los casos detectados en percances de Responsabilidad Civil con personas lesionadas –seis de cada cien siniestros son fraudes- y en los partes de robo (4,3% de partes ilegítimos).
También señaló el incremento de las reclamaciones fraudulentas en casi todas las líneas de Multirriesgo, aunque menos del 1% de los siniestros son ficticios. No obstante, incidió en el descenso del fraude en Hogar en los últimos años, pues en 2014 se detectaba fraude en el 3% de los casos. Por otro lado, destacó que dos de cada cien percances declarados en pólizas de Vida esconden algún engaño en la reclamación, mientras que en Subsidios y Decesos se estima que hay fraude en el 1,5% de los casos.
En la presentación de UNESPA también se expusieron detalladamente algunos de los mejores casos de detección de fraude premiados en esta edición de los premios, contando con la colaboración de Arlenee Lebron y Teresa Niembro (AIG); Luis de Querol (GENERALI);