También resulta habitual el fraude por simular daños importantes causados por granizo, que no sean reparables por el sistema de varillas, para intentar que una aseguradora cubra otros daños de mantenimiento en la carrocería, obteniendo el repintado del vehículo. Estos casos si están bien preparados también serán difíciles de detectar sino es por un perito de seguros, que conoce a la perfección este tipo de daño y sus características.
El CCS también es objeto de intento de fraude en los daños que atiende, siendo los más habituales los producidos por vendavales e inundaciones. Intentar simular daños ocasionados por estas circunstancias, mientras que realmente esconden averías mecánicas y electrónicas en automóviles producidas por otras causas, reclamación de bienes inexistentes en el momento del siniestro o provocar daños para intentar cobrar una indemnización, son habituales cada vez que se produce un siniestro de estas características, detectarlos será labor de los profesionales que se ocupen de atender y gestionar cada caso.
Un saludo.
Josu Martínez
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¿Cubre el seguro del coche los daños provocados por el temporal?
No todas las compañías ofrecen las mismas coberturas, y es probable que tengamos que reclamar al Consorcio de Compensación de Seguros
Fuente : ABC
El temporal ha dejado numerosos destrozos a su paso. Desde daños provocados por la lluvia o granizo, debido al peso de la nieve sobre los coches, o provocados por el desprendimiento de ramas y objetos debido a la fuerza del viento. Por eso es muy importante estudiar la modalidad del seguro del automóvil que tenemos suscrita, e incluso la compañía, porque no todas ofrecen las mismas coberturas.
Siniestros habituales como la caída de un árbol sobre un coche aparcado o los causados por el desprendimiento de rocas en una zona de riesgo no son responsabilidad de las aseguradoras, sino del Consorcio de Compensación de Seguros, al igual que otros riesgos extraordinarios como las inundaciones, las tempestades ciclónicas atípicas, los terremotos y los maremotos.
Excepto los daños causados por el granizo, que poco a poco está formando parte de las coberturas de las principales compañías aseguradoras, los daños en el coche debido a fenómenos meteorológicos no están cubiertos por el seguro del coche, aunque este sea a todo riesgo.
Si únicamente contamos con la cobertura obligatoria (seguro a terceros) el vehículo no estará cubierto ante ningún fenómeno natural, a no ser que incluya, al menos, una cobertura de daños propios –robo, lunas o incendio– o que se haya contratado una ampliación en la póliza para incluir este tipo de daños.
Un seguro a todo riesgo incluye, además de los daños a terceros, los provocados al vehículo propio, y con él, un conductor está automáticamente asegurado por el Consorcio de Compensación de Seguro, el cual se hará responsable de riesgos extraordinarios como inundaciones y vientos de rachas superiores a 120 km/h, entre otros. Lo que no incluye el Consorcio es el granizo, la lluvia directa, el peso de la nieve ni los vientos inferiores a 120 Km/h, por lo que la responsable de la indemnización será la aseguradora siempre que la póliza incluya una cobertura contra daños meteorológicos.
Desde el 1 de julio de 2016, todos los coches
asegurados con una póliza de seguro de responsabilidad civil de automóviles en España pasan a estar cubiertos por el CCS (Consorcio de Compensación de Seguros) por los daños materiales producidos por riesgos extraordinarios, aún cuando carecieran de cobertura de daños propios. El Consorcio es un organismo estatal al que va destinada una parte del dinero de las pólizas suscritas.
La comunicación de daños materiales y solicitud de indemnización habrá de efectuarse lo antes posible, bien mediante llamada telefónica o bien on-line, a través de la web del Consorcio de Compensación de Seguros.
La solicitud de la indemnización al Consorcio, tanto en el caso de daños personales como materiales, se puede presentar directamente por el propio asegurado, por el tomador o por sus respectivos representantes, o bien a través de la entidad aseguradora con la que se contrató la póliza o del agente o corredor de seguros que intervino en su contratación.
También se puede hacer mediante un escrito dirigido a la Delegación Regional del Consorcio correspondiente (según el lugar de ocurrencia de los daños), rellenando la «Hoja de Comunicación de Daños» y enviando la documentación necesaria. No obstante este método supone que su tramitación no podrá ser tan rápida como en el caso de las vías telefónica e internet, ya que en estas dos últimas el registro de la solicitud y la asignación de la misma a perito tasador de daños son procesos automatizados.
En el caso de solicitar indemnización por daños personales, (fallecimiento; invalidez permanente parcial, total o absoluta; o incapacidad temporal) la solicitud se puede presentar por una de las siguientes vías: por teléfono, por correo electrónico cumplimentando la «Hoja de Comunicación de Daños» y remitiéndola a dpto.siniestros@consorseguros.es junto con la documentación necesaria, o por correo ordinario a la siguiente dirección postal :
Consorcio de Compensación de Seguros
Departamento de Siniestros
Paseo de la Castellana, 32
28046 Madrid
En todos los casos, la solicitud se efectuará lo antes posible: cuanto menos tiempo transcurra entre la ocurrencia de los daños y la solicitud de indemnización, antes se realizará la tramitación correspondiente.
En caso de que el granizo provoque daños en las lunas del coche, la reparación está cubierta por la cobertura de lunas ya que, en este caso concreto, las aseguradoras no suelen excluir causas naturales. Si los desperfectos en el coche han sido causados por una rama o un árbol que ha caido sobre el coche, la responsabilidad recaerá sobre el propietario del terreno donde estaba plantado, lo que es también aplicable al suelo municipal (cuya responsabilidad recaerá en el ayuntamiento).
Para solicitar la indemnización, lo primero que se debe hacer es dar parte a la compañía aseguradora. En este tipo de situaciones, las compañías suelen adelantar el dinero y posteriormente, reclamarlo al Consorcio.
Si el vehículo está asegurado a todo riesgo con franquicia, se puede acudir directamente al Consorcio. El proceso es igual que si se acude a la aseguradora: tras notificar el problema en el plazo aproximado de una semana se recibirá la visita de un perito que valorará los daños del vehículo utilizando los datos de empresas especializadas en reparación de automóviles.
Tanto la compañía como el Consorcio, que tiene un límite de 21.035 euros por siniestro, abonarán la cantidad según lo estipulado en la póliza. Aseguradoras como Mapfre, Mutua o Allianz, abonarán en importe del coche nuevo si este tiene menos de dos años. A partir de ese plazo, se abona según el precio de mercado, utilizando para ello las tablas de tasaciones de la multinacional Eurotax Glass-s.