Buenos días, aunque se trata de una noticia antigua, hoy la
he seleccionado para recordar que, aun cuando las medidas para evitar los casos
fraudulentos han mejorado, sigue existiendo un problema importante con los
fraudes de falsas lesiones.
El caso publicado hoy nos muestra la dificultad que tiene
una aseguradora de demostrar que con un impacto entre retrovisores de dos
vehículos no puede causar lesiones en sus ocupantes.
Hasta un informe biomecánico ha sido necesario para
demostrar que no se generan fuerzas sobre los ocupantes tras un siniestro en el
que únicamente impactan los retrovisores.
Si un caso como este termina en juicio, nos podemos hacer
idea la dificultad de demostrar un caso de lesiones fingidas en un siniestro
más complejo.
Un saludo
Josu Martínez
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